Santiago, 19 de octubre de 2019
Durante muchos años en nuestro país se viene acumulando rabia y desesperanza frente a las injusticias a plena vista de las acciones del Estado en su conjunto, y de algunos privados que representan a un sector privilegiado de este país. Esa misma rabia, este descontento social, se expresó de distintas maneras el día de ayer con un solo slogan “NOS CANSAMOS”.
En verdad existe cansancio de los perdonazos, de la evasión tributaria de los super ricos sin ningún tipo de sanción, que 3 de cada 4 trabajadores reciban sueldos menores a $400.000, de las pensiones de $120.000 que no alcanzan ni siquiera para comprar remedios porque las cadenas de farmacias se coluden para subir sus precios, que son 5 veces más caros que el promedio OCDE, de las sanciones a los delitos empresariales a que son una verdadera burla para la ciudadanía.
Existe cansancio e indignación frente a quienes usufructuaron del mal llamado “Financiamiento irregular de la política”, quedando totalmente impunes por la falta de querellas del actual Director del SII.
Comprendemos la indignación absoluta de quienes tienen que esperar meses para obtener horas médicas por falta de recursos, enfrentando día a día un precario sistema de protección social.
Esta precariedad alcanza también a los servicios públicos y a quienes laboran en ellos, más aún cuando año tras año el recorte presupuestario pone en riesgo alto el servicio que la ciudadanía se merece.
Todos estos hechos sólo revelan la tremenda desigualdad de la redistribución de la riqueza, que se agudiza con la constante alza del costo de la vida y por la indolencia de las autoridades, que sólo se limitan a decir que la culpa es de la baja productividad de los/as trabajadores.
La respuesta del Gobierno al problema de fondo fue declarar el Estado de Excepción y entregar el control a las Fuerzas Armadas, asumiendo explícitamente su incapacidad para conducir los destinos del país.
La continuidad de la movilización y manifestación pacífica de la ciudadanía, y su extensión en todas las regiones del país, da cuenta de la derrota de esta estrategia de criminalización y descalificación de la demanda popular, de la aplicación de “mano dura” frente conflictos sociales que solo pueden ser superados a través del diálogo social.
En este sentido expresamos nuestro más absoluto rechazo respecto a la decisión del gobierno de declarar un estado de excepción constitucional, que vulnera principios esenciales de la vida democrática y derechos ciudadanos básicos como son la libertad de desplazamiento y de reunión, en un intento burdo por responsabilizar a la ciudadanía de sus propios errores de gestión.
Estamos evaluando junto a nuestras federaciones y confederaciones de trabajadores, las acciones a desarrollar desde nuestras organizaciones, con el fin de exigir la inmediata normalización de nuestro orden democrático.
Sin embargo, expresamos nuestro rechazo a la destrucción realizada en el equipamiento público de la ciudad, y especialmente el ataque que se produjo a nuestras dependencias ubicadas en calle Santa Rosa, en la comuna de Santiago Centro, en la que afortunadamente no resultó ningún funcionario o persona lesionada.
En lo que respecta a la operación del SII, hemos solicitado a las autoridades institucionales, velar por la seguridad de nuestros funcionarios y de los contribuyentes, a través de la implementación de medidas de flexibilidad horaria hasta la completa restitución del sistema de transporte capitalino, y evaluar la continuidad temporal de actividades de presencia fiscalizadora y de oficinas ubicadas en sectores aledaños a protestas.
Bajo el contexto de este estallido social, el movimiento sindical y social exigimos dar un giro completo de la agenda política del país. Exigimos al gobierno y a las distintas bancadas parlamentarias desechar las contrarreformas y medidas regresivas en materia Tributaria, Educacional, Previsional, Laboral y de Modernización del Estado; dando respuestas efectivas a las demandas de la ciudadanía.
Los/as funcionarios/as del SII nos declaramos en ESTADO DE ALERTA permanente, evaluando día a día las acciones que seguiremos en conjunto con los sindicatos del sector privado y público, con los movimientos sociales y con la ciudadanía que entiende que finalmente no nos pueden seguir pasando Gato por Liebre.
DIRECTORIOS NACIONALES AFIICH Y ANEIICH
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